Jornada Nacional de Oración por la Santificación del Pueblo Argentino y la Glorificación de sus Siervos de Dios.
Está prevista para el lunes 1° de noviembre próximo y lleva por lema
"San José, con corazón de Padre, custodia a nuestro pueblo". Convoca
la Delegación Episcopal para las Causas de los Santos.
La Delegación Episcopal para las Causas de los Santos convocó a la 25ª
Jornada de Oración por la santificación del pueblo argentino y la glorificación
de sus Siervos de Dios, prevista para el lunes 1° de noviembre próximo.
El organismo episcopal presentó el afiche y la estampa de oración de la
edición 2021, que lleva por lema "San José, con corazón de Padre, custodia
a nuestro pueblo".
La reciente beatificación de Fray Mamerto Esquiú elevó a catorce el
número de beatos argentinos proclamados entre casi medio centenar de causas
para canonizar a religiosos y laicos de esta tierra que dieron testimonio de su
fe o murieron por su fidelidad al Evangelio.
De los catorce beatos argentinos, siete fueron durante el pontificado
de Francisco: Enrique Angelelli, Carlos de Dios Murias OFMConv, Gabriel
Longueville y Wenceslao Pedernera; María Antonia de Paz y Figueroa (Mama
Antula), Catalina María de Rodríguez y Gregorio Martos Muñoz.
Los demás beatos argentinos son:
Beata Laura Vicuña: Laica de Viedma, beatificada en Roma por el papa
Juan Pablo II el 3 de septiembre de 1988. Se celebra el 22 de enero.
Beato Artémides Zatti: Coadjutor salesiano, de Viedma, beatificado el
14 de abril de 2002 en Roma, por Juan Pablo II. Se conmemora el 13 de noviembre.
Beata María del Tránsito de Jesús Sacramentado (Madre Cabanillas): Religiosa,
de Córdoba, beatificada en Roma el 14 de abril de 2002 por Juan Pablo II. Se
conmemora el 25 de agosto.
Beata María Ludovica De Angelis: Religiosa, de La Plata, beatificada en
Roma el 3 de octubre de 2004. Su fiesta el 25 de febrero.
Beato Ceferino Namuncurá: Laico, de Viedma, beatificado en Chimpay (Río
Negro) lugar de su nacimiento, el 11 de noviembre de 2007 por el delegado de
Benedicto XVI, cardenal Tarcisio Bertone, secretario de Estado del Vaticano. Su
fiesta el 26 de agosto.
Beata María Crescencia Pérez Religiosa, de San Nicolás de los Arroyos.
Beatificada el 17 de noviembre de 2012 en la ciudad de Pergamino, provincia de
Buenos Aires por el prefecto de la Congregación vaticano para las Causas de los
Santos, cardenal Angelo Amato. Su memoria es el 20 de mayo.
Tres son los santos: San Héctor Valdivielso Sáez, mártir
(1910-1934), San José Gabriel del
Rosario Brochero, sacerdote (1840-1914) y Santa Nazaria Ignacia March,
religiosa (1889-1943). (AICA)
Los mártires del Zenta, camino a la santidad. Serán los próximos beatos
argentinos.
El papa Francisco autorizó a la Congregación para la Causa de los
Santos a promulgar los decretos relativos al martirio de los Siervos de Dios
Pedro Ortiz de Zárate, sacerdote diocesano, y Juan Antonio Solinas, sacerdote
profeso de la Compañía de Jesús, asesinados por odio a la fe el 27 de octubre
de 1683 en el Valle del Zenta, Argentina.
Luego de aprobado el proceso de beatificación en una reunión de la
Congregación de Obispos y Cardenales en el Vaticano, el Santo Padre dio el
visto bueno y los mártires de la fe salteños iniciaron oficialmente su camino
hacia los altares.
La historia de los mártires se remonta a 1683 cuando en el Valle de
Zenta, a 3 kilómetros de Pichanal en la capilla de Santa María, fue consumado
el martirio del presbítero Pedro Ortiz de Zárate, vicario de Jujuy, del
sacerdote jesuita Antonio Solinas (ambos misioneros) y sus acompañantes
criollos y aborígenes (dos españoles, un mulato, un negro, una mujer indígena,
dos niñas y 16 aborígenes).
Los dos sacerdotes se internaron en la zona del Chaco salteño, con el
objetivo de llevar la Palabra de Dios a los pueblos originarios, pero fueron
martirizados (por llevar el mensaje de Cristo) por las tribus Tobas y Mocovíes,
unos 500 aborígenes masacraron a los misioneros con garrotes y decapitándolos.
Los restos del vicario don Pedro Ortiz de Zárate fueron llevados a la
catedral de Jujuy y los del padre Solinas a la iglesia matriz de Salta, la
antigua iglesia jesuita de calle Caseros y Mitre, donde fue enterrado cerca del
altar. Los demás quedaron enterrados en el sitio de su martirio.
Todos los años desde esa época en octubre se realiza una peregrinación
desde Pichanal hasta el lugar de martirio presidida por el obispo de Orán. En
2002 el Vaticano otorgó el "nihil obstat", una declaración oficial en
la que queda asentado que no existe ningún obstáculo para continuar en la
beatificación de dichas personas.
El 28 de septiembre del 2021, los cardenales dieron voto positivo para
iniciar el proceso, continuando así a paso firme su trayecto hacia los altares
de estos mártires de la fe. (AICA)
A continuación entrevista a Mons. Santiago Olivera Delegado Episcopal de la Causas de los Santos sobre la jorrnada nacional del 1º de noviembre.
https://youtu.be/ZpZu5YMFatw